Cómo descomprimir archivos en Windows 11: guía completa y actualizada

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La compresión y descompresión de archivos es una de esas tareas informáticas que, aunque parezca simple, puede ahorrar mucho tiempo y quebraderos de cabeza. En Windows 11, tanto guardar espacio como gestionar grandes volúmenes de datos se ha vuelto más sencillo, pero todavía hay usuarios que no tienen claro cómo aprovechar todas las posibilidades que ofrece el sistema. Tanto si recibes archivos comprimidos por email, como si necesitas liberar espacio en tu disco duro o compartir una carpeta entera de documentos, saber cómo comprimir y descomprimir archivos en Windows 11 te vendrá de perlas.

A continuación, vas a encontrar una guía completa, natural y muy detallada para convertirte en todo un experto en la gestión de archivos comprimidos: desde los pasos básicos usando las herramientas del propio sistema operativo, hasta soluciones avanzadas para formatos como RAR, ZIP, 7z y mucho más. También hablaremos de las mejores aplicaciones gratuitas y qué hacer cuando algo sale mal. Todo de forma clara y amena, para que no te pierdas ningún detalle.

¿Por qué comprimir y descomprimir archivos?

Antes de meternos en faena, conviene tener claro qué ventajas aporta la compresión de archivos. Comprimir archivos te permite ahorrar espacio en el disco duro o en la nube, facilita el envío de documentos grandes por Internet y agrupa varios ficheros en uno solo, lo que simplifica mucho el trabajo a la hora de compartir información.

Al descomprimir, simplemente recuperamos los archivos originales para poder editarlos, ejecutarlos o visualizarlos tal y como estaban antes. Tanto el proceso de comprimir como el de descomprimir se puede realizar con herramientas nativas que ya trae Windows 11, aunque existen otras opciones para tareas más avanzadas.

Comprimir archivos en Windows 11 paso a paso

En Windows 11, no hace falta instalar ningún programa externo para comprimir archivos en formato ZIP, ya que el propio sistema operativo integra una función muy sencilla para esta tarea. Aquí tienes los pasos básicos para comprimir archivos o carpetas:

• Selecciona los archivos o carpetas que deseas comprimir usando el Explorador de archivos.
• Haz clic con el botón derecho sobre cualquiera de los elementos seleccionados.
• Elige la opción Comprimir en archivo ZIP en el menú contextual.
• Automáticamente se creará un nuevo fichero ZIP en el mismo directorio, con el nombre que elijas.

Lo bueno de este método es su rapidez: no elimina los archivos originales y te permite cambiar el nombre del archivo comprimido en el momento.

Eso sí, la herramienta nativa de Windows 11 solo permite comprimir en formato ZIP, que es el más universal pero no el único.

Descomprimir archivos ZIP en Windows 11 sin instalar nada

Extraer archivos comprimidos en formato ZIP con Windows 11 es de lo más sencillo, ya que el soporte es nativo. Existen dos formas principales:

• Haz clic derecho sobre el archivo ZIP y selecciona Extraer todo. Se abrirá una ventana donde puedes elegir la carpeta destino y, tras confirmar, se extraerán todos los archivos.
• Si solo quieres consultar el contenido del ZIP, haz doble clic sobre el archivo: el Explorador de archivos lo abrirá como si fuese una carpeta más y podrás ver y copiar los archivos que quieras individualmente.

Esta función integrada resulta muy útil y es suficiente para la mayoría de usuarios que trabajan solamente con el formato ZIP. Sin embargo, tiene una pega: no permite abrir otros formatos de compresión muy populares, como RAR o 7z.

Limitaciones del sistema nativo de compresión de Windows 11

Aunque la función de compresión de Windows 11 es muy cómoda, es importante tener en cuenta sus limitaciones principales:

• Solo admite el formato ZIP, tanto para comprimir como para descomprimir.
• No es compatible con archivos divididos en varias partes o volúmenes.
• No permite ajustes avanzados como cambiar el grado de compresión, cifrar, proteger por contraseña o elegir el formato de destino.

Para muchos usuarios esto no será un problema, pero si necesitas trabajar con RAR, 7z u otros formatos o quieres personalizar al máximo la compresión, tendrás que recurrir a programas de terceros.

¿Qué pasa con los archivos RAR, 7z y otros formatos?

Durante años, abrir archivos RAR en Windows solo era posible usando programas externos como WinRAR o 7-Zip. Sin embargo, Microsoft anunció la integración de soporte nativo para una mayor variedad de formatos, incluyendo RAR, 7z, TAR, GZ, entre otros, en las últimas actualizaciones de Windows 11 gracias al proyecto de código abierto libarchive.

Aunque esta función está llegando progresivamente (y puede que no la tengan todos los equipos aún), en breve será posible descomprimir archivos RAR directamente desde el Explorador de archivos, sin instalar nada más. Eso sí, si tienes Windows 10, necesitarás seguir usando aplicaciones externas.

Programas gratuitos y potentes para comprimir y descomprimir en Windows 11

Si tus necesidades van más allá del ZIP, existen varias aplicaciones, la mayoría gratuitas, especializadas en la gestión de archivos comprimidos con soporte para decenas de formatos. Entre las más recomendables destacan:

7-Zip

7-Zip es una de las favoritas de los usuarios por ser totalmente gratuita y de código abierto. Permite comprimir y descomprimir en formatos como 7z, XZ, BZIP2, GZIP, TAR, ZIP y WIM. Pero para descomprimir puede con casi cualquier cosa: APFS, AR, ARJ, CAB, CHM, CPIO, DMG, ISO, LZH, LZMA, MSI, NTFS, RAR, RPM, VHD, VMDK, WIM, XAR, Z, entre otros muchos.

Sus ventajas incluyen una mayor tasa de compresión que el ZIP tradicional, la posibilidad de crear archivos protegidos por contraseña y compatibilidad con ficheros de gran tamaño. Tras instalarlo, añade nuevas opciones al menú contextual de Windows para que trabajar con archivos comprimidos sea todavía más ágil.

NanaZip

Si buscas algo tan potente como 7-Zip pero más integrado en los nuevos menús de Windows 11, NanaZip es la elección perfecta. Es un fork (una variante) de 7-Zip adaptado a las últimas versiones del sistema, con controles mejorados y el mismo soporte para formatos avanzados.

PeaZip

PeaZip destaca por su énfasis en la seguridad: permite la encriptación de archivos, envío directo por email o a la nube y una compatibilidad enorme con más de 150 formatos (ACE, ARJ, CAB, DMG, ISO, LHA, RAR, UDF, ZIPX, etc). Es también gratuito y ofrece conversión entre diferentes tipos de compresión.

WinRAR y WinZip

Por supuesto, WinRAR sigue presente y es el programa más conocido para trabajar con archivos RAR, ZIP, 7Z y muchos otros. Aunque WinRAR es de pago, permite usarlo sin restricciones durante bastante tiempo. Lo mismo ocurre con WinZip, ideal para quienes buscan una experiencia profesional y muchas opciones avanzadas.

Otras opciones populares

Existen alternativas como Zipware, con opciones de escaneo de virus y gestión avanzada de archivos, o Lhaplus para quienes necesitan soporte específico en ciertos formatos. Además, aplicaciones online como Unzip Online o Extract Me permiten descomprimir archivos directamente desde el navegador, sin instalar nada y de manera muy cómoda, aunque suelen tener límites de tamaño por archivo.

Cómo descomprimir archivos RAR en Windows 11 paso a paso

Mientras el soporte nativo para RAR no llega a todos los equipos, te detallamos cómo abrir archivos RAR en Windows 11 con programas externos:

• Con 7-Zip: Instala 7-Zip, haz clic derecho sobre el archivo RAR y elige la opción Extraer o Extraer aquí para descomprimir el contenido en la ubicación que prefieras.
• Con WinRAR: Instala WinRAR, abre el archivo RAR o haz clic derecho sobre él y selecciona la opción adecuada para extraer los archivos a una carpeta concreta.
• Con PeaZip o Lhaplus: Similar a los anteriores, selecciona el archivo y usa la opción de extraer. Recuerda que Lhaplus puede tener limitaciones si el archivo supera los 4 GB.
• Desde la web: Usa servicios como Archive Extractor, Unzip Online o Extract Me. Sube tu archivo RAR y descarga los archivos extraídos al momento.

Para la mayoría de usuarios, 7-Zip es tan completo que es la opción más recomendable por su compatibilidad y porque es gratuito.

¿Y si no puedes descomprimir o el archivo está dañado?

En ocasiones, intentar abrir un archivo comprimido genera errores: el archivo está dañado, no se puede extraer, o el software da fallos. Antes de desesperarte, prueba estos consejos:

• Actualiza el programa que estés usando (7-Zip, WinRAR, etc.), ya que muchas veces los errores se deben a versiones antiguas.
• Descarga el archivo de nuevo o pide al remitente que te lo envíe otra vez, especialmente si sospechas que se ha corrompido durante la transferencia.
• Si usas Lhaplus y tu archivo es muy grande, considera cambiar de programa.
• Repara archivos dañados con WinRAR: Abre el archivo RAR en WinRAR, selecciona la opción Reparar y guarda el resultado. No siempre funciona, pero merece la pena intentarlo.

Un truco extra: si tras descomprimir se han perdido archivos importantes, usa herramientas de recuperación como Tenorshare 4DDiG. Este tipo de software puede recuperar documentos borrados, incluso de archivos comprimidos dañados.

Ventajas de comprimir y descomprimir online

Si solo necesitas comprimir o descomprimir archivos de forma puntual y no quieres instalar nada, las herramientas online pueden sacarte del apuro. Simplemente accede desde tu navegador, sube el archivo ZIP o RAR y descarga el contenido descomprimido. Son muy prácticas para archivos no demasiado grandes y situaciones rápidas.

Eso sí, ten en cuenta las limitaciones de tamaño (suelen admitir archivos de hasta 200 MB) y la privacidad, ya que el archivo se sube a un servidor externo y puede eliminarse automáticamente tras unas horas.

Consejos extra para usuarios avanzados

• Los formatos como 7z o RAR ofrecen mayor tasa de compresión y opciones avanzadas como cifrado o protección por contraseña.
• El soporte integrado de Windows 11 irá ampliándose y es cuestión de poco tiempo que puedas olvidarte de instalar software externo para casi cualquier formato.
• Usar software actualizado es clave para evitar problemas con archivos dañados o incompatibles.
• Si recibes archivos divididos en varias partes, asegúrate de tener todos los fragmentos antes de intentar descomprimirlos.

Este proceso facilita la gestión de archivos, permitiéndote ahorrar espacio, mejorar la organización y compartir documentos de forma rápida y sencilla. Aunque la funcionalidad nativa de Windows 11 cubre muchas necesidades básicas, contar con programas adicionales puede ampliar enormemente tus posibilidades, especialmente cuando trabajas con formatos más complejos o en proyectos que requieren opciones avanzadas.

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